Esta historia habla de cómo nadie aunque quiera puede apartarse de Dios que es Santo, Glorioso, Digno y todopoderoso y que el de cualquier manera hára que cumples el mandato que él te ha dicho y más si es para ayudar a otras personas.
La historia empieza con un hombre llamado Jonás que es un creyente en la palabra de Dios y anda por las ciudades del mundo predicando la palabra, pero un día una voz le hablo a Jonás, no era un ángel sino el mismísimo Jesús, el cual le dijo ve a Nínive y habla sobre mi porque por su gran pecado la voy a destruir. Jonás sentía que no tenía que ir a Nínive sino que ellos tenían que pagar por todo el pecado que ellos habían cometido y que él no tenía que ir a predicarles.
Después de esto Jonás bajo a Jope y de allí tomo un barco hacía Tarsís, pago su pasaje y zarpó, siendo su intención de permanecer lejos de la presencia del señor, cuando estaban en el mar el señor desato una gran tormenta sobre él y mientras eso estaba pasando y los que estaban abordo estaban sufriendo Jonás estaba durmiendo en la bodega del barco. Los marineros tenían miedo y tiraban cosas pesadas al mar para aligerar el barco además cada uno clamaba a su dios, que eran dioses falsos, el capitán del barco se le acerco a Jonás y le dijo: Como es que estas durmiendo? levántate clama a tu Dios que quizá piense en nosotros y no perezcamos.
Entonces todos empezaron a echar suertes y la suerte cayó sobre Jonás, la suerte se hizo para saber quién era el que les había mandado tan gran calamidad, le dijeron a Jonás que le dijera porque les paso eso que él había hecho para que pasara y dijo: soy hebreo, y temo al señor Dios del cielo, que hizo el mar y la tierra.
Jonás le dijo a los hombres que lo tomaran y lo tiraran al mar así se iba a calmar pero los hombres en vez de hacer se pusieron a remar con afán para no tener que tirar a Jonás al mar pero no pudieron así que al final tuvieron que tirar al mar a Jonás al tirarlo el mar se calmó y Dios envió un gran pez que se lo tragara.
Jonás no digerido oro por tres días y tres noches cuando paso esto el señor ordeno al pez que vomitara a Jonás en tierra y lo hizo, Dios le mando otra vez a Jonás ir a Nínive y el fue y predico y Nínive fue perdonado por Dios.
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