¿Cuál dios es superior sobre todos? Esta fue una de las preguntas que se hicieron los personajes de la obra de Platón, El Banquete. Esta corta obra nos lleva a un banquete griego, y nos presenta a Sócrates, Aristófanes, Alcibíades, Pausanias, Eriximaco, Agatón y Fedro. Ellos tienen un extenso debate sobre el amor.
Todo empieza con Agatón, organizando un banquete. Pero lo bueno comienza con Erixímaco (el cual es el moderador), ya borracho, y una introducción bella a la conversación, que dice:
«¿No es irritante, Erixímaco, que en honor de algunos otros dioses haya himnos y peanes compuestos por los poetas y en cambio en honor del Amor, que es un dios de tan elevada importancia y categoría, ni un sólo, entre tantísimos poetas que han existido, haya compuesto jamás siquiera un encomio?»
Una introducción llena de curiosidad y pasión, lo cual me llamó la atención. A través de esta primera parte de la historia, se recalca algo muy importante, que el Amor fue primero y que siempre ha estado presente. Claro que usando a Eros como el representante del amor, ya que él es el dios del amor según la mitología griega. Luego él propone que cada uno de los presentes hagan un elogio o alabanza al Amor, a Eros.
«…Pienso, por tanto, que cada uno de nosotros debe decir un discurso, de izquierda a derecha, lo más hermoso que pueda como elogio de Eros y que empiece primero Fedro, ya que también está situado el primero y es, a la vez, el padre de la idea…»
Hay 7 discursos en esta historia, uno por cada personaje presentado.
Todo empieza con Fedro, y su discurso tipo introducción para nosotros los lectores. Él habla de quién es Eros (la deidad). Profundizando en sus orígenes, y su esplendidez, también su naturaleza. Fedro deja claro que Eros es el dios más honorable de todos, ya que lleva a cualquier individuo a morir por un ser querido.
El segundo discurso es de Pausanias, y este fue un argumento refutando a Fedro. En este, él habla de como Eros tiene doble naturaleza: Eros Pandemo o Afrodita, que es el Eros que representa el amor vulgar y físico, el amor impulsivo de los jóvenes. Y luego está Eros Uranio, que es el Eros del amor puro y virtuoso, del amor por la filosofía y sabiduría.
El tercer discurso fue el de Erixímaco, el moderador, el cual continuó con el hilo de Pausanias sobre la doble naturaleza. Él hablaba de cómo se necesita equilibrio entre los dos tipos de amor, pero lo hace desde una perspectiva médica y biológica: el amor sano y el amor enfermo.
El cuarto discurso fue dicho por Aristófanes, y hablaba de cómo el humano no es consciente de lo poderoso que es Eros y como lo deberían honrar más. Habla sobre el mito de los inicios del hombre y cómo se dividía en tres sexos: masculino, femenino y andrógino. Y como luego el cuerpo femenino fue dividido por la mitad, al igual que el masculino, y que el amor es la búsqueda de esa otra mitad. Agatón, el anfitrión, no aportó nada nuevo, pero sí resumió o enumeró los diferentes temas que habían sido tratados.
El discurso de Sócrates fue bien extenso. Él elogió los anteriores discursos y les dio una lección de, no sobre quién, pero sobre qué es Eros. Él dice que Eros es hijo de Poros y Penia, y cómo él heredó algunas características de ellos. Ya que por un lado él puede ser seco, duro y pobre. Y el otro es bello y sabio. Y aclaró que no era ni mortal ni inmortal, ya que el deseo de hacer el bien es lo que lo hace lo que es.
Y por último está el discurso de Alcibíades. Él habla sobre las virtudes de Eros y resalta el discurso de Sócrates.
Me gustó mucho esta historia porque muestra ese respeto que estos personajes tienen por el amor, aunque ya que el mundo es pecaminoso no es literalmente al amor, sino a Eros. Pero, amé como contaban ese trasfondo de Eros y como no todos estaban de acuerdo con lo que decía el otro. Lo recomiendo mucho para las personas que gustan de la filosofía, y los que no también. Pero, sólo tener en cuenta que toca el tema del amor homsexual. Ciertamente, esta es una historia bella escrita por Platón.
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