Las Hijas de Tara fue escrito por Laura Gallego y publicada por la editorial SM. El libro trata de Kim, una mercenaria que trabajaba para la Hermandad De La Noche. Una noche, en la que estaba programada robar PROBELLUM, una compañía de armas nucleares, su jefa, Donna, le dijo que fuera a robar Nemetech, una compañía de biobots, con ayuda de TanSim, el hacker de su grupo.
Luego de que TanSim desactivara las cámaras, Kim se internó en el laboratorio donde guardaban los millones de Biobots, sin saber que el biobot que buscaba, llamado AD-23674-M cambiaría su vida de manera drástica, obligándola a recorrer los páramos.
El género de este libro es Ciencia Ficción, y el desarrollo de los personajes es muy bueno, el libro te dice qué el personaje sintió en un momento indicado. Me llamó mucho la atención esta frase: «Habéis sido esclavos durante mucho tiempo. Habéis estado sumidos en la oscuridad. Cuando eso sucede, la luz del sol hace daño a los ojos.» Ya que me recuerda a cuando el humano está cegado por el pecado, que le predican el evangelio, siente que es un mito, una leyenda más, cuando en verdad es la verdad más preciosa que existe. Además, este libro me recordó a cómo la tecnología ha avanzado a un punto que la naturaleza se ha visto amenazada, y todas las especies que se han extinguido en las últimas décadas.
En el clímax nos vamos dando cuenta de que no es una pelea de hombre contra hombre, si no de hombre contra naturaleza. Me gusta como la autora transformó las situaciones de hoy en día a un nivel mayor, pero si uno se pone a pensarlo bien, si seguimos como seguimos vamos a ir a parar a eso, a un punto que no sepamos que el agua es transparente, que pensemos que siempre fue de colores, como azul, roja, verde, etc.
Otra frase que me llamó la atención fue: «Esa es una gran enfermedad de las dumas. No sois capaces de ver que el amor es capaz de grandes cosas. Algo dentro de ti llora desconsoladamente, urbanita.» Esta frase fue dicha por Moira, una salvaje, al Chris no entender que amaba a Semira, quien se acababa de sacrificar por él.
«Vosotros, los urbanitas, os creéis los dueños del mundo, y miráis hacia otro lado cuando nos veis, porque os recordamos vuestros fracasos… sí… os recordamos que sois humanos… y que no sabéis crear sin destruir…» Dicha por una mutante, producto de los experimentos maquiavélicos de los urbanitas, al haber secuestrado a Kim, reprochándole las cosas que le habían hecho en los laboratorios.
«Cuando mueras, ¿adónde irás?» Este fragmento fue dicho por Hana, o la Madre Blanca, al Kurt --En en prólogo-- pedirle que lo mate, por que no tenía ganas de seguir viviendo como un urbanita. Y Kurt le dijo que nadie va a ningún sitio cuando muere, cosa en la que Hana lo corrigió.
Personalmente, este libro me gustó mucho, Kim aprendió, y nosotros con ella, a que no debemos tener una mente tan cerrada. Lo recomiendo un 8/10, por que nos enseña a cuidar la naturaleza, creación de Dios.
Anna Espinal
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