Este hermoso libro cada vez me trae gozo y alegría, mientras más y más conozco la trama. Y con lo poco que llevo y lo mucho que me falta, ya he aprendido un sinfín de cosas. Puedo decir sin dudas, que me he sentido acogida en el mundo de «EL Conde de Montecristo» por Alexandre Dumas de una manera extraordinaria. Una historia que te lleva a viajar entre miles de páginas llenas de aventuras y emociones que no tiene final.
En mi ofrenda de tiempo a la lectura de este, he descubierto nuevas posibilidades que jamás imagine que podrían llegar a darse. Ya que como dicho antes en mi anterior entrega, mi estimado Edmundo Dantés, (el personaje principal de esta historia) logra escapar ingeniosamente del caliginoso Castillo de If. Luego de 14 largos años de espera sin respuestas, bajo una perpetua lobreguez. Después de este milagroso suceso, Edmundo se aventura a un mundo que no había visto desde hace mucho tiempo. Una pequeña neblina de recuerdos le quedaba de aquella olvidada atmósfera de personas, debido a su prolongada prisión. Pero lo más sorprendente es que envés de rendirse y dejarse consumir por las emociones, este hace de las suyas para sobrevivir en ese viejo lugar abandonado por sus recuerdos.
Esto, ciertamente, me llama mucho la atención. Ya que, el pobre Dantés, debía de acostumbrarse a una realidad totalmente distinta a la de su ayer. Su mente debía de estar en una cabina de tiempo, algo totalmente aterrador. ¿Qué sería de sus seres queridos? Que seguramente lo habían olvidado a causa del temible tiempo. ¿Qué de su hogar y su trabajo? De donde se sustentaba y mantenía. Y la pregunta que seguramente él se hacía constantemente debía de ser: ¿Qué diablos voy a hacer ahora con mi vida? Supongo que es una realidad también en nuestro mundo actual. Si nos ponemos a pensar en las personas cautivas por sus atroces delitos, que luego de una larga cantidad de años salen de su prisiones, conociendo un mudno totalmente nuevo. Pero la diferencia aquí es que todos esos miserables infelices les falta algo que Edmundo si tenía: Total inocencia, manchada por el odio ajeno. Tal y como digo en cada uno de mis escritos.
Este caso indudablemente me trae tristeza y melancolía a mi ser. Pues voy maquinando lo atemorizado que debió estar su corazón en esos momentos de total incertidumbre. Y esto me hace pensar en qué mi persona haría, si se encontrase en esos estados. Por su puesto concibo la idea de que estaría en total caos interior. Asustada y atormentada por mi futuro. Efectivamente estaría perdida. No obstante, me sorprende mucho la rudeza y fuerza de corazón que tiene Dantés a pesar de las adversidades. Un corazón que permanece firme y marchando sin importar lo que pase.
Y esta activa resistencia se refleja claramente en nuestros estilos de vida cristianos en la actualidad y en el porvenir. Ya que nuestra comunidad ha estado siendo bombardeada por ideologías paganas junto a momentos muy difíciles. Y por esta y muchas otras más razones, debemos de mantenernos fuertes a pesar de las locuras de allá afuera y el miedo que nos provoquen. Como Edmundo, debemos de combatir y mantenernos firmes ante todas las situaciones. Ya que la Biblia nos reitera lo destruido que está nuestro mundo: «Ha desaparecido el bondadoso de la tierra, y no hay ninguno recto entre los hombres […] » Miqueas 7:2. Mostrándonos así, que estaremos rodeados de tiempos difíciles (como los actuales; pandemia, guerras e inestabilidad económica) pero aun así debemos de permanecer firmes. Ya que tenemos la fe y la convicción de que el Señor nos guardará, tal y como dice en Salmos 01:4: «Con Sus plumas te cubre, Y bajo Sus alas hallas refugio; escudo y baluarte es Su fidelidad».
Y es por esto y por muchas cosas más, que este libro me asombra cada vez. Ya que es como un dulce padre, que muestra su hijo la pura verdad y lo adiestra. Algo que esta obra sin lugar a dudas me ha estado mostrando. Me ha demostrado una cara limpia y pura de amor y la enseñanza, de una manera entretenida. Agradecida estoy, ya que luego de estar pasando actualmente momentos difíciles personales, este libro me ha servido de mucho apoyo. Como digo en cada uno de mis escritos, me matan las ganas de seguir leyendo y conocer más sobre la increíble tinta de Dumas.
Edmundo Dantés en libertad
Frase a recordar: «Los tiempos difíciles no duran para siempre, pero las personas fuertes sí»
Robert H. Schuller
¡Cuántas ganas tengo de leerlo! Me encanto tu integración bíblica, ya que ciertamente debemos de mantenernos firmes, tranquilos sabiendo que Dios tiene control y nos cuida.
Me gustó la forma como narras la historia, ya que atrae y da un sentimiento de querer leerla
Wow Jois! Así como decías que tu libro te impresiona cada vez más, así me siento yo al leer esto. Me encanta como conectaste con la Biblia de una manera tan viva, transparente e increíble. También me gusta que cuando escribes es como si dejases que tu mente, pensamientos y sentimientos gobiernen tu escritura, lo cual la hace brillante.